El Día Mundial en recuerdo de las Víctimas de accidentes de Tráfico se celebró por primera vez en 1993 en el Reino Unido. Desde entonces, un gran número de países, bajo la coordinación de organizaciones no gubernamentales, conmemoran este día.
El Día Mundial en Recuerdo fue creado en homenaje a las víctimas del tráfico y sus seres queridos, por la difícil situación que atraviesan al tener que afrontar las consecuencias emocionales y prácticas de estos sucesos. El 26 de octubre de 2005, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas adoptó la resolución 60/5, mediante la cual se convoca a los gobiernos a que designen el tercer domingo de noviembre de cada año como el Día Mundial en recuerdo de las Víctimas de accidentes de Tráfico.
La conmemoración de este día brinda la oportunidad de atraer la atención del público sobre las consecuencias y los costes de los accidentes de tráfico y las medidas de prevención que deben tomarse. También permite recordarles a los gobiernos y a la sociedad la responsabilidad que tienen en cuanto a la seguridad de las carreteras, y para estimular su actividad para cesar esta sangría.
Con este motivo el día 21 de noviembre a las 12:00 de la mañana en la jefatura provincial de tráfico vamos a guardar un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de los accidentes de tráfico. Los accidentes en carretera provocan en el mundo la muerte de cerca de 1,3 millones de personas y daños o alguna incapacidad en otros 50 millones. Constituyen la principal causa de mortalidad entre los jóvenes de edades comprendidas entre los 15 y los 29 años.
El elevado número víctimas de accidentes de tráfico, es un grave problema que redunda en diversas cuestiones, no sólo de índole económica sino en aspectos fundamentales de su vida personal, familiar, social y laboral. Las víctimas padecen múltiples necesidades que deben ser atendidas para paliar y reducir los daños corporales, psicológicos y materiales del accidente y que abarcan desde la primera intervención en crisis hasta la alta terapéutica.
Los accidentes de tráfico, comprenden fases progresivas de intervención –desde el accidente hasta el seguimiento final del caso- que deben de estar coordinadas y atendidas en beneficio de las víctimas para evitar la victimización secundaria y que en muchos supuestos, finalizan en procedimientos judiciales o bien con graves carencias asistenciales.
Las víctimas de los accidentes de tráfico se encuentran en muchos casos en una especial situación de indefensión como consecuencia del accidente, siendo habitual el desconocimiento de los largos y farragosos procesos que deben emprender. El artículo 24 de la Constitución Española dice que todas las personas tienen derecho a la tutela judicial efectiva de sus derechos e intereses legítimos sin que, en ningún caso, pueda producirse indefensión. Este artículo se hace extensivo a las víctimas de los accidentes de tráfico.
La Dirección General de Tráfico, pensando que las víctimas de los accidentes de tráfico son uno de los objetivos prioritarios y fundamentales de su ideario de trabajo, ha creado las Unidades de Víctimas de Accidentes de Tráfico (UVAT), ubicadas en todas las Jefaturas Provinciales de Tráfico. De este modo, a través de estas Unidades, se facilita el acceso de las víctimas a los recursos existentes, se vela por sus derechos y se promueve la participación de las instituciones y las administraciones locales, autonómicas y nacionales.
Este año 2016, el mensaje que se propone difundir entre todos los celebrantes de este minuto de recuerdo es la importancia que para las víctimas suponen las actuaciones posteriores al siniestro, en sus tres dimensiones: actuación sanitaria, investigación y adecuada cobertura legal. En ese acto, queremos recordar también a las Asociaciones de víctimas, además de a las propias víctimas, a sus familiares y a sus amigos. La Dirección General de Tráfico no solo vela porque cada día haya más minutos sin fallecidos en nuestras fronteras y allende de ellas, sino que además nos ponemos a su disposición con ayudas de diferente índole y siempre una actitud de apoyo y atención.
Cada año en nuestro país muchas personas son víctimas de un accidente de tráfico, un hecho imprevisible, trágico y desestabilizador para el que nadie está preparado. Solamente el año pasado en nuestra provincia más de 1.800 personas fueron víctimas (fallecidos o heridos) de un accidente de tráfico, si tomamos los últimos cinco años el número de víctimas supera los 11.000.
Todas estas personas vieron su vida afecta por este hecho y, en mayor o menor medida, precisaron de alguna asistencia física o psicológica. En total, a nivel nacional, estas Unidades de Victimas han atendido a más de 70.000 personas desde su creación en 2013.
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