Carlos Rojas, Antonio Escámez y José García Fuentes hicieron entrega del cheque a la representante de la asociación, además de todos los alimentos donados por los asistentes a la cita deportiva
El Campeonato de Gimnasia Rítmica logró recaudar 1.000 euros que fueron donados a la asociación benéfica Jesús Abandonado, además de otros tantos kilos de alimentos no perecederos, que fueron llevados por las alumnas de la Escuela Municipal y las personas asistentes a la gala celebrada en el Pabellón Cubierto.
Carlos Rojas, alcalde de Motril, Antonio Escámez, teniente de alcalde de Deportes y Medio Ambiente, y José García Fuentes, teniente de alcalde de Economía e Interior, hicieron entrega de este cheque a Inmaculada Cabello, representante de la asociación benéfica, que agradeció a los presentes su solidaridad.
Hay que recordar que la iniciativa se llevó a cabo desde la Escuela Municipal de Gimnasia Rítmica, comandada por las monitoras Charo Alabarce, María de la O Palomares y Ana María García, y nació con la finalidad de colaborar con las familias que más lo necesitan en estos momentos.
Para ello, la entrada al Campeonato Municipal de Gimnasia Rítmica se puso al precio de un euro, de modo que todo aquel que asistiera colaborara de algún modo. Además, se animó al público a que llevara un kilo de productos no perecederos, algo que todas las niñas de la Escuela Municipal también hicieron, lográndose por tanto una excepcional muestra de solidaridad unida al deporte.
En cuanto al ámbito deportivo, fueron unas 300 niñas y algunos niños de la Escuela Municipal los participantes en este acto solidario con el que se finalizaba la temporada haciendo una exhibición en conjuntos y a nivel individual que hizo las delicias de todo el público, que llenó el Pabellón Cubierto.
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