“Esto es una vergüenza, no se puede consentir que se gasten una millonada en obras innecesarias, como la de la Avenida de Salobreña, y sin embargo a los establecimientos que generamos empleo y abanderamos el sector turístico local nos tengan olvidados. En Motril no se para de vender “hoteles en el aire” y sin embargo no son capaces de poner los pies en el suelo y dar solución a estos problemas que dan una pésima imagen del interés por fomentar el turismo.”, declaran José A. Molina y Carmen López, propietarios del Restaurante Katena y del camping Playa de Poniente en Motril, Presidente y Vicepresidenta de ADEHOS, Asociación de Hostelería de la Costa Tropical.
La situación viene de antaño y nunca se ha acabado de poner solución a la acumulación de aguas en la carretera que es, turísticamente hablando, la Gran Vía del turismo motrileño. Hoy es posible ver como las canoas comparten carretera con las motocicletas y coches.
El camino del Pelaíllo, entrada natural a Playa Granada, pasa a convertirse en la “pequeña Venecia” cada vez que caen cuatro gotas. En este camino se ubican varios hoteles, camping y numerosos restaurantes que en época de lluvia convierten a los clientes en “secuestrados” ya que resulta casi imposible salir de los mismos.
Varios propietarios de establecimientos de la zona van a solicitar que el Ayuntamiento, de inmediato y sin excusas, pongan una solución a estos problemas que “lo único que hacen es tirar por los suelos la promoción turística que cada uno hacemos. De nada nos vale invertir en excelentes instalaciones, en campañas de publicidad, si cuando caen dos gotas aparece un río a la entrada de nuestro negocio”, indica el propietario de otro comercio de la zona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario