Ni están arrepentidos,
ni han pedido perdón, ni tienen conciencia de haber hecho nada malo, ni
entienden por qué media España está en la calle protestando.
Si les hubiéramos
enseñado qué es el machismo, qué es una violación, qué es el consentimiento,
qué es el respeto.
Si les hubiésemos
enseñado a tratar bien a sus compañeras sexuales, si les hubiésemos concienciado
sobre la importancia de respetar la libertad sexual de las mujeres.
Si desde la familia y
les hubiésemos hablado de derechos humanos y feminismo, si como sociedad nos
les hubiéramos convencido de que hay mujeres respetables y mujeres que no lo
son.
Si no hiciéramos porno,
mal llamado películas, con el mensaje de que como machos tienen derecho a
planear una violación, a cometerla, grabarla, y a reírse de su víctima con los
amigos, quizás estos chicos no hubiesen violado a la mujer de Pozo-Blanco, Córdoba
ni a la mujer de San Fermines.
Pero lo hicieron
porque les hemos enseñado y han aprendido que las mujeres son de usar y tirar, (todas
excepto sus novias, a las que hemos enseñado a aguantarles y amarles sobre
todas las cosas).
Lo hicieron porque
pueden hacerlo siempre que quieran, pagando en puticlubs a otros hombres, o sin pagar… violando: si son multados, que
suponen 6 mil euros? Lo hicieron porque saben que desde la judicatura, desde
los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, desde el periodismo, desde las personas de su entorno, son protegidos y apoyados, y sabemos que volverán a hacerlo, ellos y sus fans, porque ahora
saben que en España existe impunidad para los violadores.
Las estadísticas son
frías como la sonrisa de una estatua. Y nos cuentan que casi uno de cada tres
españoles violaría a alguna mujer si no fuera por las repercusiones
penales.
Parece que sus
Señorías acaban de dinamitar ese muro de contención. Lo hacen en un país donde
se registra oficialmente una violación cada seis horas.
Necesitamos con
urgencia educación feminista para acabar con la cultura de la violación y con
el machismo que nos mata, nos viola, nos destroza por dentro y por fuera. Necesitamos
dinamitar la estructura patriarcal que sustenta esta sociedad enferma, que
hemos creado.
Necesitamos justicia
para acabar con la impunidad y la violencia
Duele saber que hace
unos días empezó el verano, este con una novedad, hay barra libre de nosotras.
#BastaYa, #NosQueremosVivasYLibres.
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