Uno de los siete inmigrantes de origen magrebí que fueron rescatados el sábado 12 de agosto en una patera a la deriva en las costas granadinas ha sido dado de alta por lo que queda ingresado ya sólo uno, que permaneció más tiempo en la UCI, en planta en el Hospital Comarcal de Motril, con evolución favorable, según informaron fuentes sanitarias.
Asimismo, el pasado martes recibía el alta otro de los inmigrantes que viajaba también a bordo de la embarcación y que tuvo que ser hospitalizado al igual que sus compañeros, al ser hallados con síntomas de deshidratación, quemaduras y afección renal, consecuencia de llevar 15 días a la deriva.
Los otros cuatro expedicionarios interceptados, que permanecían detenidos desde el 12, fueron repatriados días después por la Policía Nacional a sus países de origen.
La patera fue localizada por un velero que navegaba por la zona y alertó a Salvamento Marítimo, que trasladó a los inmigrantes en la Salvamar 'Mirfak' hasta el puerto de Motril.
Según relataron a la Policía los propios magrebíes rescatados, la expedición partió en una embarcación a remos desde una zona cercana a la frontera con Argelia y estaba compuesta por cuatro personas más que fallecieron en el trayecto -dos al lanzarse al mar y otros dos, por la precaria situación que soportaron-. Sus cuerpos fueron arrojados al mar.
Según relataron a la Policía los propios magrebíes rescatados, la expedición partió en una embarcación a remos desde una zona cercana a la frontera con Argelia y estaba compuesta por cuatro personas más que fallecieron en el trayecto -dos al lanzarse al mar y otros dos, por la precaria situación que soportaron-. Sus cuerpos fueron arrojados al mar.
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