El número de viajeros que se desplazan en autobús las líneas que van a Torrenueva, Carchuna, Calahonda o la playa de Motril, disminuye considerablemente entre semana y, según el encargado de Alsina Graells en Motril, Paco Alcalde, “este servicio únicamente resulta rentable los fines de semana”.
El número de pasajeros en general y no sólo en trayectos cortos, según Alsina Graells, ha disminuido durante este verano con respecto a otras temporadas estivales. A pesar de que la empresa ofrece cada año un mejor servicio interurbano con amplitud de horarios nocturnos y destinos más amplios, cada vez menos gente opta por usar el autobús para desplazarse a los anejos, a las playas del municipio o a los chiringuitos por la noche. Según Paco Alcalde esto se debe a que “las personas son cada vez más cómodas y prefieren optar por métodos como un conductor sobrio cada noche antes que tener que desplazarse a pie hasta la estación de autobuses y posteriormente hacer el trayecto hacia el chiringuito”.
En cuanto a los destinos en auge durante este verano, decrece la opción de Almuñécar, salvo para visitar el parque acuático AquaTropic, cuyas playas se encuentran saturadas de visitantes, y gana enteros la opción de Salobreña o Nerja como destinos veraniegos de quienes usan el autobús para desplazarse.
Los trayectos de interior se mantienen como años anteriores, en el caso de las subidas y regresos diarios desde la Costa a la capital de Granada. Algo diferente ocurre con la línea de Madrid, donde se ha producido un incremento en el número de viajeros, tanto en la llegada de visitantes a la Costa como en los desplazamientos de Motril a Madrid, que se debe, en gran medida y según Paco Alcalde, “a los buenos enlaces que existen hacia otros lugares del norte de España como Bilbao, Santander o Asturias y a la creciente oferta turística-residencial que existe actualmente en Motril y la Costa, tras la creación de nuevas urbanizaciones”.
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