Hoy se ha publicado en el BOE la Orden HAP/663/2016, de 4 de mayo, por la que se reducen, para el período impositivo 2015, los índices de rendimiento neto en el método de estimación objetiva del IRPF para las actividades agrícolas y ganaderas afectadas por diversas circunstancias excepcionales. COAG Granada considera que el Ministerio de Hacienda no ha sido suficientemente sensible ante el pésimo año experimentado por los distintos sectores agrarios, marcados por la mala meteorología y la incidencia de las plagas, que ha provocado un incremento de costes que, con precios a la baja, han reducido considerablemente la rentabilidad de las explotaciones.
Especialmente se destaca la discriminación sufrida en las hortícolas, que no han visto reflejada la mala campaña provocada por las irregularidades meteorológicas (lluvia torrencial, granizo, heladas y temperaturas anormalmente altas o bajas cuando no corresponde), que han agudizado la crisis de precios.
Han quedado fuera cultivos tan importantes en nuestra provincia como el pepino, cuando las altas temperaturas de otoño-invierno provocaron una concentración excesiva de pepinos en el mercado, que trajo como consecuencia una bajada drástica en el precio y que durante varias semanas se mantuvo ligeramente por encima de los 0,20 €/kg. Hay que tener en cuenta que el coste de producción del pepino ronda los 0,35 €/kg.
Tan sólo el tomate, el espárrago y el calabacín han conseguido ver reducido el módulo correspondiente, al 0,22 en el caso del tomate y al 0,18 el calabacín y el espárrago en Granada y Almería.
Tampoco han conseguido reducir el módulo los subtropicales, obviándose el informe presentado por COAG Granada, en el que se detallaban las pérdidas en rendimientos y producción que han provocado principalmente las escasas precipitaciones y humedad que se han dado durante el desarrollo del cultivo, y que han afectado a todas las plantaciones, así como los problemas fitosanitarios principalmente la araña de cristal en aguacate y la cochinilla en mango.
Otros sectores:
Además los sectores ganaderos han visto seriamente mermados sus ingresos debido a la climatología atípica, marcada por la ausencia de pastos ante las escasas lluvias y la consiguiente obligación de suplementar la alimentación (lo que implica un incremento de costes y por tanto una caída de la rentabilidad). Asimismo, se ha producido una reaparición de la lengua azul (Córdoba, Sevilla, Huelva, Málaga, Cádiz y Jaén y comarca de Motril en Granada), que ha obligado a vacunar (más gastos sobrevenidos) y un repunte de tuberculosis bovina, que afecta sobre todo al vacuno de carne, lo cual también ha ocasionado mayores gastos por el incremento de las actuaciones sanitarias y pérdidas económicas por los sacrificios obligatorios y las restricciones de movimiento de salida de los terneros. El vacuno de leche se ha visto gravemente afectado además por la liberalización de las cuotas lácteas a partir del 1 de abril de 2015.
Por todo ello, COAG Andalucía había pedido el módulo 0 para el vacuno de leche y el 0,09 para bovino y ovino de carne y para caprino de carne y leche. Sin embargo, el vacuno de leche se ha quedado en el 0,16 y el ovino y caprino de leche en el 0,18. El vacuno, porcino, ovino y caprino de carne sí reciben una menor reducción, quedando en el 0,09.
Asimismo, el módulo para el sector apícola, si bien ha pasado del 0,26 al 0,18, no se ha reducido suficientemente. COAG Andalucía había pedido el módulo 0 también para este sector, ante la incidencia de las altas temperaturas y la falta de lluvia, que han dado lugar a una escasa floración y han obligado a sobrealimentar a las abejas y a reponer los censos perdidos. La campaña apícola 2015 ha sido pésima, con muy baja producción en toda Andalucía y pérdida en torno al 50-60% respecto a un año medio, con zonas en las que prácticamente no se han llegado a usar los extractores.
Idéntica situación se ha producido en el caso del almendro, que ha pasado del 0,26 al 0,18, a pesar de haber sufrido una situación de sequía extrema que ha provocado un fuerte descenso de rendimiento por falta de floración y unas producciones muy por debajo de años anteriores, además de ver comprometida la supervivencia de los árboles para futuras cosechas. El almendro también ha sufrido pérdidas por plagas como el pulgón y la orugueta, por lo cual COAG había pedido igualmente el módulo 0 para este cultivo. El mismo resultado se ha dado en el caso de los cereales, que pasan del 0,26 al 0,18, a pesar de que COAG había pedido una reducción mayor, atendiendo a las consecuencias de la sequía y la merma de producción.
COAG Andalucía también considera insuficiente la reducción de módulo de los cítricos, que pasan del 0,26 al 0,22; de las oleaginosas, que descienden del 0,32 al 0,22, y de las proteaginosas, de se reducen del 0,26 al 0,18.
Lo mismo ocurre con el olivar, que sólo baja del 0,26 al 0,22, a pesar de haber sufrido la incidencia de plagas como el prays y la mosca del olivo, y las secundarias del barrenillo y euzophera.
COAG Granada solicitará una corrección de errores de la Orden publicada para que se incluyan los cultivos que han quedado fuera de la misma sin justificación.
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