11/1/18

La Guardia Civil desmantela un punto de venta de marihuana en Torvizcón y detiene a un hombre de 41 años


 
La Guardia Civil ha desmantelado un punto de venta de marihuana en Torvizcón en una operación en la que ha sido detenido un individuo de 41 años de edad, sin antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de cultivo y tráfico de droga, y un delito de defraudación de fluido eléctrico.

En esta operación los agentes de la Guardia Civil de Torvizcón intervinieron 1,2 kilos de marihuana dispuesta para su venta, 176 plantas de cannabis sativa en proceso de secado y dispuestas en cuerdas y en unas bandejas específicas para ello, 45 plantas aún en maceteros en proceso de crecimiento, una máquina de envasado al vacío y cerca de 40.000 euros en efectivo.

La operación es fruto de la cooperación ciudadana. Varios vecinos alertaron a la Guardia Civil del fuerte olor a marihuana que se desprendía de la vivienda del ahora detenido, por lo que sospechaban que pudiera dedicarse al cultivo de marihuana.

Estas sospechas se vieron refrendadas con el informe que elaboró la compañía eléctrica suministradora, en el que se afirmaba que en dicho domicilio había un elevado consumo de electricidad, muy superior al habitual en una vivienda unifamiliar.

Una vez autorizados por el Juzgado de guardia de Órgiva, los agentes de Torvizcón realizaron un registro en la vivienda del sospechoso y descubrieron que este había dispuesto varias habitaciones para el cultivo del cannabis y la elaboración de marihuana: en una habitación tenía las plantas en proceso de crecimiento, en otra tenía una serie cuerdas que atravesaban la habitación y de bandejas que colgaban del techo donde se secaban las plantas y en la última se encontraba la máquina de envasado al vacío, que es donde supuestamente envasaba la marihuana.

En el registro la Guardia Civil también encontró una importante cantidad de dinero que presumiblemente procedía de la venta de droga y descubrió dónde estaba la toma fraudulenta de electricidad.

La compañía eléctrica Endesa y la Guardia Civil colaboran de forma permanente en la detección de anomalías en la red eléctrica con el fin de garantizar no sólo el suministro para el resto de ciudadanos, sino también su seguridad.

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