30/11/08

Más de 7000 esquiadores en Sierra Nevada a pesar de las fuertes nevadas







Nieve sin cesar. Así podría resumirse el pasado fin de semana en Sierra Nevada. Tras un sábado en el que el fuerte viento y las nevadas obligaron a reducir a 7 kilómetros la superficie esquiable, el domingo pudo aumentarse hasta 10.

El uso de obligatorio de cadenas desde el kilómetro diez de la carrterea (en Cenes de la Vega) era el anticipo de una jornada más propia de la estepa siberiana que del sur de Europa.

Los dos telecabinas en funcionamiento

Pese a la intensa nevada, que fue casi constante durante todo el fin de semana, los 7300 esquiadores que subieron a Sierra Nevada entre el sábado y el domingo no estaban dispuestos a volverse sin calzarse los esquís e hicieron uso de los dos telecabinas de la estación, que por primera vez en la temporada funcionaron conjuntamente. No obstante, a media mañana, el mal tiempo obligó a parar el Al-Ándalus, que se había estrenado ayer, aunque sin consecuencias para el tránsito de deportistas hacia las pistas.

Tampoco se acobardaron los miles de portugueses que se acercaron este fin de semana a Sierra Nevada, con motivo de su fiesta de independencia.

Fuera de pistas

Aunque las condiciones climatológicas fueron delicadas, no se ha registrado ningún incidente de gravedad. No obstante, hay que recordar el riesgo de avalanchas fuera de pistas y el consiguiente peligro que conlleva salirse de ellas.



El puente de la Inmacualada

De cara al próximo puente de la Inmaculada, la Agencia Española de Meteorología prevé que el mal tiempo continúe hasta el jueves, día 4. La cota de nieve se situará durante la semana entre los 600 y los 900 metros y los vientos oscilarán entre los 60 y 70 kilómetros hora, disminuyendo por la tarde.

Salvo imprevistos de última hora, se prevé que para el puente estén abiertas todas las áreas esquiables de la estación aunque sin llegar a la totalidad de las pistas.

Para hoy lunes, la previsión es de 10 kilómetros esquiables con un espesor de entre 30 y 120 centímetros distribuidos entre las zonas de Parador, Rio y Borreguiles. No obstante, esta superficie podría aumentar en función de las condiciones climatológicas.

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