Con este proyecto, el Área de Gestión Sanitaria Sur de Granada pretende usar las experiencias de estos menores para ayudar a otros pacientes pediátricos
Los menores ingresados en el Hospital de Motril disponen de un libro de visitas, desde el comienzo del presente curso escolar, donde expresar opiniones, contar experiencias y dirigirse a otros posibles niños y niñas que leerán sus relatos cuando, como ellos, hayan de acudir al hospital. Este proyecto está coordinado por la maestra del centro hospitalario.
En este libro los alumnos y alumnas cuentan cómo se sienten, cómo se encuentran, plasman su opinión sobre los profesionales que les atienden y sobre la atención que se les presta. En definitiva, ponen en palabras o imágenes sus pensamientos, emociones y sentimientos con respecto a sus vivencias y el abordaje de las mismas.
Los objetivos que se han barajado para poner en marcha este proyecto pasan por lograr que los menores ingresados se sientan protagonistas de su propio proceso de salud, facilitándoles que trasladen su experiencia de hospitalización al papel. El hecho de relatar, mediante palabras o dibujos esta fase de su vida fomenta también el desarrollo de su creatividad y mejora su autoestima, convirtiéndose en pequeños artistas que dejan su huella en el libro. Además, el relato de sus experiencias les ofrece la posibilidad de ayudar a otros niños y niñas que pasarán por su misma cama y habitación del hospital.
Por otra parte, y acorde al primero de los procesos estratégicos planteados en el II Plan de Calidad de la Consejería de Salud, la expresión de las opiniones de los menores permitirá a los responsables del Área de Gestión Sanitaria Sur de Granada conocer las necesidades y expectativas de los niños y niñas hospitalizados, población sobre la que no se dispone datos de satisfacción. Este libro se convierte así en una auténtica fuente de datos cualitativos sobre las percepciones de los menores atendidos en el centro hospitalario.
Aula Hospitalaria
El aula del Hospital de Motril, adscrito al área, abrió sus puertas en 1990, y atiende a una media diaria de siete niños y niñas de entre 3 y 15 años, algunos de ellos ingresados y otros que, por motivo de consulta pediátrica pasan por la Unidad de Pediatría de este centro. Su objetivo fundamental es atender al alumnado hospitalizado para asegurar la continuidad del proceso de aprendizaje.
Lo lúdico y lo educativo conviven cotidianamente en el aula pediátrica, desarrollándose periódicamente actuaciones relacionadas con las fiestas tradicionales y contando habitualmente con la presencia de la doctora Pupas y el enfermero Flojeras, personas voluntarias, que, una o dos veces por semana, amenizan la labor que se realiza en el aula hospitalaria, entreteniendo y distendiendo a menores y familiares. Así mismo, un día a la semana, profesionales del proyecto Mundo de Estrellas acuden al aula, facilitando a los niños el acceso a los recursos de Internet de contenido didáctico.
El aula cuenta además con una pecera, cuya presencia y las tareas a ella asociadas (dar de comer a los peces, observarlos…) relaja y calma a los niños y niñas, que se encuentran atravesando una situación estresante como puede ser la enfermedad o la realización de pruebas diagnósticas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario