La Plaza de las Culturas de Órgiva se convirtió ayer en el escenario escogido para la clausura del curso 2014-2015 de las alumnas de las Escuela Municipal de Músicas y Danzas Tradicionales de la localidad. Un año más el encuentro se convirtió en un auténtico hervidero de orgullosos familiares, además de vecinos y visitantes, para ver bailar a la treintena de alumnas residentes en Órgiva y procedentes de más de una decena de nacionalidades diferentes.
Un espectáculo en el que se pudieron ver desde las alumnas más pequeñas de cinco años de edad interpretando los diferentes bailes de iniciación a la danza, además de bailes como el candil, la tarara o tangos canasteros, hasta las mayores, de no más de 14 años, que hicieron un repaso a los bailes regionales.
Tras el baile, donde estuvieron presentes también todos los miembros del equipo de gobierno, tuvo lugar la entrega de diplomas a las participantes, y donde la alcaldesa de Órgiva, María Ángeles Blanco, felicitó a las alumnas por “los magníficos bailes”, y agradeció “el trabajo de Tere (la profesora) durante todo el año por aunar cultura y tradición a través del baile, así como a sus familiares por apoyar a las pequeñas”.
La profesora, Teresa Barrientos, que se mostró “muy orgullosa” por el resultado de las actuaciones, lleva ya más de 25 años enseñando a bailar desde las raíces a todas las alumnas que han pasado por la Escuela Municipal pertenecientes incluso a varias generaciones.
En Órgiva, con casi 6.000 habitantes, conviven actualmente más de 60 nacionalidades, en su mayoría británicos y rumanos. Un ejemplo de integración y diversidad cultural es el que muestran desde la Escuela Municipal de Música y Danzas Tradicionales de Órgiva, donde las alumnas proceden también de diversas nacionalidades y donde se ve una clara muestra de integración y convivencia.
Un espectáculo en el que se pudieron ver desde las alumnas más pequeñas de cinco años de edad interpretando los diferentes bailes de iniciación a la danza, además de bailes como el candil, la tarara o tangos canasteros, hasta las mayores, de no más de 14 años, que hicieron un repaso a los bailes regionales.
Tras el baile, donde estuvieron presentes también todos los miembros del equipo de gobierno, tuvo lugar la entrega de diplomas a las participantes, y donde la alcaldesa de Órgiva, María Ángeles Blanco, felicitó a las alumnas por “los magníficos bailes”, y agradeció “el trabajo de Tere (la profesora) durante todo el año por aunar cultura y tradición a través del baile, así como a sus familiares por apoyar a las pequeñas”.
La profesora, Teresa Barrientos, que se mostró “muy orgullosa” por el resultado de las actuaciones, lleva ya más de 25 años enseñando a bailar desde las raíces a todas las alumnas que han pasado por la Escuela Municipal pertenecientes incluso a varias generaciones.
En Órgiva, con casi 6.000 habitantes, conviven actualmente más de 60 nacionalidades, en su mayoría británicos y rumanos. Un ejemplo de integración y diversidad cultural es el que muestran desde la Escuela Municipal de Música y Danzas Tradicionales de Órgiva, donde las alumnas proceden también de diversas nacionalidades y donde se ve una clara muestra de integración y convivencia.
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