28/7/09

Polémica por el festival 'Son de Azúcar'



El PSOE afirma que el fracaso del Son de Azúcar ha costado a la ciudad más de 40.000 euros

Ana Toledo hace referencia a la mala planificación del Gobierno municipal, la escasa afluencia de público, la utilización de Protección Civil para pegar carteles como causas del fiasco y desvela que, además, hubo que rehacer toda la cartelería por un fallo de imprenta



La concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Motril, Ana Toledo, ha denunciado que el fracaso y mala gestión del Gobierno del PP y el PA en la organización del Festival Son de Azúcar, un evento que ha costado a los motrileños más de 40.000 euros, podría acabar con su desaparición. Ana Toledo ha indicado que la asistencia media a los dos conciertos no ha superado las 400 personas e incluso ha habido más gente en el botellón del Paseo Marítimo de la Playa de Poniente que en los escenarios. La edil socialista ha informado además de que un fallo en la impresión de los folletos y carteles del Festival obligó al Ayuntamiento a gastar una cantidad importante de dinero en elaborarlos de nuevo y que la concejalía de Turismo utilizó a los voluntarios de Protección Civil a pegar los carteles del Son de Azúcar en la ciudad.

Ana Toledo ha solicitado al Gobierno de Rojas información sobre el coste total del Son de Azúcar, incluidas la reimpresión de los carteles, la infraestructura y el Plan de Seguridad. La concejal del PSOE ha aludido a la mala planificación del Gobierno municipal y al paupérrimo trabajo de la concejalía de Turismo en la promoción del Festival como claves del fracaso de un Festival que nació como foro de intercambio cultural y social entre España y América, siempre en torno a la caña de azúcar y su industria, y que también celebraba conferencias, talleres, teatros y las actuaciones musicales de grupos destacados, pero que ahora ha perdido toda su esencia.

La edil socialista ha añadido que las expectativas de afluencia de público no fueron correctas y ha acusado a los responsables municipales de inflar los datos de asistencia para maquillar su fracaso.

Ana Toledo ha recordado que el Son de Azúcar ni siquiera hizo competencia al botellón que sigue celebrándose cada fin de semana en la Playa de Poniente, todo ello a pesar de la inversión publicitaria hecha por el Consistorio para promocionar los conciertos, una campaña en la que han tenido el apoyo inestimable de la Diputación, y que los responsables del Gobierno municipal agradecieron quitando a la institución provincial de las banderolas instaladas junto al escenario.

Francisco Villoslada recuerda al PSOE que la propia diputada de cultura alabó el cartel de esta edición del Son de Azúcar

El responsable de Turismo ha respondido a las acusaciones de la concejala socialista Ana Toledo informando que el caché de todos los artistas de este Son de Azúcar ha sido inferior al de Óscar de León, que fue contratado por los anteriores dirigentes y ha sido el concierto que menos público han atraído


Francisco Villoslada, teniente de alcalde de Turismo, Agricultura y Pueblos Anejos del Ayuntamiento de Motril, ha querido salir al paso de las acusaciones del Partido Socialista sobre el Son de Azúcar. En primer lugar, le ha pedido a la concejala Ana Toledo “que pida cita al oftalmólogo ante su ya comprobada falta de visión, y que antes de hablar que por lo menos se informe”.

Y es que para el responsable municipal las declaraciones vertidas por la socialista han sido “una serie de mentiras que más parecen tener la finalidad de querer hacerse un poquito de publicidad”. Villoslada ha expuesto que todo el que estuvo en los conciertos del pasado fin de semana pudo ver “a las miles de personas que asistieron.
Con respecto al coste de esta edición del Son de Azúcar, el teniente de alcalde de Turismo ha explicado que el caché de todos los artistas participantes en este año “ha sido inferior al de un solo artista que su partido, el PSOE, dejó contratado antes de irse, y que no es otro que Oscar de León, al que hubo que traer desde Venezuela y congregó menos gente que cualquiera de los que han actuado este año”.
Ha recordado que en este caso hubo que asumir obligatoriamente este concierto porque había sido ya firmado, a pesar de que hubo que correr con los gastos de hotel, traslados, e incluso los instrumentos, ya que ni eso traían”. A esto ha añadido que

“Desde esta área consideramos que en Andalucía y el resto de España tenemos grupos lo suficientemente buenos como para no tener que traer a artistas desde Venezuela o Cuba a unos precios prohibitivos”, ha apuntado Villoslada, añadiendo que “seguramente es lo que ellos quisieran, como asiduos visitantes de estas tierras han demostrado ser”.
En cuanto a la cartelería, en primer lugar ha dejado claro que no hubo que hacer ninguna reimpresión, a pesar de que venía con un error -en ningún momento achacable al área de Turismo- éste se corrigió en tiempo y sin ningún coste adicional. Con respecto a la distribución, los carteles –que no folletos, que no se han realizado- se repartieron por todo Motril y por los municipios vecinos. “A los voluntarios de Protección Civil se les hizo entrega de algunos ejemplares para que los colocaran en las casetas donde prestan sus servicios en las playas y en los dos puntos de información turística, pero en ningún momento estuvieron repartiendo carteles”, ha dejado claro Villoslada.
Por último, ha agradecido la colaboración y prestada y el apoyo de la institución de la Diputación de Granda a través de su área de Cultura, con el co-patrocinio del Son de Azúcar, “sobre todo en la persona de su diputada, María Asunción Pérez Cotarelo, quien acudió a acompañarnos en la presentación, afirmando que el cartel elegido era “muy equilibrado y de mucha calidad” y alabando que se hubiera optado por mantener la cita aún a pesar de tener que recortarla en días”, ha señalado.
Por último ha dejado claro que esta área va a seguir apostando por el Son de Azúcar, y que si ha habido que hacer modificaciones ha sido por la situación económica, máxime cuando la Junta de Andalucía no ha aportado nada a estos eventos en los últimos años.

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