La Audiencia Provincial de Granada ha condenado a cinco años de prisión a O.K. de 22 años de edad, por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, y de conformidad entre las partes, tras ser sorprendido por la Guardia Civil después de haber desembarcado en la Playa de Calapino en Castell de Ferro, de una embarcación que patroneaba con 28 personas abordo, las cuales habían pagado entre 600 y 900 euros para entrar de forma clandestina en el país.
Según la sentencia los hechos ocurrieron sobre las 10.00 horas del pasado 9 de septiembre de 2005, cuando los agentes sorprendieron al ahora condenado en la playa tras haber desembarcado de una embarcación que conducía y que rompió para que se hundiera y no pudiera ser avistada una vez llegó a la costa.
En la embarcación neumática viajaban 28 inmigrantes a los que "con ánimo de ver enriquecido su patrimonio" el condenado había facilitado su entrada de forma clandestina en territorio español.
La sentencia señala que O.K. puso en riesgo la vida de los inmigrantes, muchos de los cuales no sabían nadar "al no contar durante una travesía de 30 horas de las más elementales medidas de seguridad" como chalecos salvavidas, bengalas o medios de señalización y por transportar en dicha embarcación varios botes de combustible.
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